Las tronas convertibles son elementos muy útiles para el bebé porque disponen de una funcionalidad única y es que gracias a sus materiales de fabricación, pueden tomar forma de una mesa de juego o de una silla en la que el bebé podrá sentarse y estar tranquilo sin que tú te gastes más dinero en otro artilugio.
En este artículo queremos hacer una pequeña guía acerca de lo que es una trona convertible, cuáles son las ventajas que tiene frente a los inconvenientes y qué es lo que debemos tener en cuenta antes de hacernos con un ejemplar de la misma. Investigaremos los tipos que más se venden y cuáles son los más indicados para ti. ¿Te animas a saber más detalles sobre este elemento?
¿Qué vamos a ver?
Para definir una trona convertible tendríamos que valorar de entrada los diferentes usos que tiene ésta. Son muchas las madres que a la llegada del bebé piensan en todo aquello que deben comprar y la cantidad de dinero que van a tener que dejarse. Gracias a la trona que tenemos aquí haremos un tres en uno con la mesa de juego y una silla en la que se pueda sentar.
Con la idea de que los elementos del bebé no te ocupen demasiado espacio, éstas han nacido para hacerte la vida mucho más sencilla. A pesar de que no todas son plegables, lo cierto es que podremos ahorrarnos espacio consiguiendo tres elementos en la base de uno. Este detalle gusta a muchos padres pues estamos dando la oportunidad de tener una silla y una mesa de juego en la que el niño estará plácidamente mezclando sus juguetes y divirtiéndose.
Este tipo de tronas son muy efectivas sobre todo si estamos pensando en tener más de un bebé, ya que con ellas podrás aprovechar la ocasión y, en el momento en que nazca tu segundo hijo, que éste disponga de un tres en uno que siempre nos apetece. ¿Hay alguna marca que te guste especialmente?
La edad en la que tu hijo deja la trona convertible es para que la madre lo pase directamente a la mesa. Existen algunos modelos de este objeto que sí que exponen el tiempo que debe de tener el bebé para que se cambie pero cuando se trata de una convertible no nos basamos en ningún patrón.
Algunas madres aseguran que hasta los dos años es la edad ideal para que el pequeño comience a cambiarse a la silla o cualquier otro espacio que lo haga sentir más mayor. Los padres debemos estar muy atentos a cada uno de los detalles puesto que será nuestro hijo el que nos haga darnos cuenta de qué es lo que le hace falta y si realmente ha llegado el momento del cambio.
Un profesional de las tronas o del comportamiento del bebé te puede ayudar con este detalle de saber si tu hijo tiene que estar aún en la misma. Conocer cada uno de los puntos desde otra mirada puede ser la forma de llevar antes a la conclusión de qué es lo que tenemos que hacer y cuánto ganaremos con el cambio. ¡No te quedes con la duda!
Las marcas son importantes para muchas madres que están mirando qué trona convertible comprar al bebé. Como para todo elemento de puericultura que se nos venga a la cabeza, la compañía que esté detrás de los mismos es fundamental en la gran mayoría de casos. Graco, Baby Dan, Inglesina o Chicco son algunas de las más famosas que se han dejado ver en el mercado actual.
Con muy buenas garantías de uso en casi todos los casos, las tronas para bebés son duraderas y aportan un conjunto de elementos al niño que le hará entretenerse y estar cómodo desde el principio. Conocer las características de cada uno de los modelos que hay expuestos, te valdrá para hacerte con el que más te gusta de todos pero muy especialmente para saber si cubrirá las necesidades que tienes con respecto a tu bebé.
Si has visitado un establecimiento físico de puericultura, o bien has entrado en una tienda online relacionada, te habrás dado cuenta de la enorme variedad de opciones que se te ponen a tu disposición para elegir la trona; es por ello por lo que, para encontrar la mejor opción, deberías de centrarte en ciertos criterios, como los que te apuntamos a continuación:
Dependiendo del modelo de trona convertible que hayamos podido elegir, se podrá convertir de una manera más o menos sencilla. Por lo general esto no debería de entrañar ningún problema: es decir, una vez que la hemos convertido en mesa es porque el bebé tiene la edad suficiente cómo para no necesitar ya usarla de la otra manera… pero no siempre es así.
Si la vamos a estar convirtiendo de manera habitual, asegúrate de que el procedimiento sea sencillo para no complicarte demasiado.
También es importante comprobar que esa trona sea estable; es decir, que no exista ninguna posibilidad de que el bebé la pueda llegar a tirar y, con ello, que se pueda caer al suelo.
Cuando hablamos de la seguridad de una trona convertible mesa, o de cualquier otro modelo, nos referimos a la presencia de un cinturón de seguridad que tendrá el objetivo de restringir sus movimiento evitando que se pueda caer de la misma.
Podemos encontrar este modelo de cinturón con un sistema de sujeción de 3 puntos, o bien con un sistema de sujeción de 5 puntos. Te recomendamos que no te la juegues y que te decantes por la última opción que es, sin ninguna duda, la más fiable.
Y terminamos analizando este criterio que también es crucial. Recuerda que la trona debe de ser práctica, que te ayude a ahorrar tiempo y no lo contrario.
Si no cuentas con demasiado espacio en tu casa, puedes elegir una trona que se pueda plegar, o bien una trona de viaje que no ocupe demasiado.