Ecografía Doppler

Problemas de obstrucciones: Si se sospecha que el paciente tiene un problema en las penas o en las arterias (lo más común es la formación de trompos venosos o arteriales), se puede utilizar una “ecografía Doppler” para poder confirmar o rechazar el diagnóstico.

También es un método adecuado para detectar placas de colesterol, así como enfermedades como de trombosis profunda venosa en la zona de las piernas.

Enfermedades de carácter cardiovascular: Es uno de los usos más habituales. En el caso de que el torrente sanguíneo no se estimule de la forma adecuada, se pueden llegar a producir problemas como de insuficiencia valvular en la zona del corazón, así como estenosis. En esta situación, seguramente el facultativo recomendará también un cardiograma para poder conocer la severidad que estos problemas están ocasionando en nuestro organismo.

Detección de problemas en el embarazo: En la recta final del embarazo, cuando la mujer va “a monitores”, en realidad lo que hace es someterse a este tipo de procedimiento. Por lo general, esto tiene dos objetivos: poder analizar que el bebé está en buen estado, y determinar si el organismo de la madre funciona de la forma correcta.

Ayuda a identificar problemas de malformación fetal (por ejemplo, si las arterias están desorganizadas, si el flujo sanguíneo no es el que debería ser…), Preeclampsia (un trastorno que se produce en el embarazo cuando la tensión de la mujer se eleva demasiado y puede ser catastrófico para el feto) o sufrimiento fetal (cuando la cantidad de nutrientes y oxígeno que debería de llegar al feto a través de la placenta no es suficiente, precisamente porque esta ya es demasiado vieja como para servir a tal efecto.

Planificación de cirugías: Por otra parte, también se utiliza la ecografía Doppler para poder preparar algunas cirugías que requieran de un procedimiento algo más específico. Digamos que ayuda a los facultativos a identificar la zona que se va a tratar: si se detectase cualquier tipo de anomalía, es posible que hubiera que hacer ciertos cambios en la cirugía para evitar que el paciente corra cualquier tipo de riesgo.

En definitiva, estamos hablando de un tipo de prueba que, debido a su carácter previsor, puede salvarte la vida a la hora de experimentar más de una enfermedad.

Si te tienes que hacer una ecografía Doppler, no te pongas nervioso y ya verás cómo todo queda en nada.